Sobre las piernas y su valor publicitario
Reconocemos que íbamos a dedicar este comentario a las piernas femeninas, esa parte de la anatomía del cuerpo de las bípedas humanas en la que la moda actual ha basado lo fundamental de la capacidad de atraer la atención, en principio, del sexo contrario.
La imagen de la inolvidable pretty woman Julia Roberts, presentándose en el Festival de Cine de San Sebastián a recoger el premio a su carrera, con una minifalda de las que se ha dado en llamar (estúpidamente, desde luego) "de vértigo", constituía una referencia actual al respecto de la importancia de enseñar unas bonitas piernas.
También habría que referirse a la obsesión por presentar un cuerpo atractivo que es común a princesas, cónyuges de políticos relevantes, ministras y sus alternativas democráticas o no, empresarias, directivas y empleadas. Nadie podrá negar -en su sano juicio varonil- que la moda de los minipantalones y las minifaldas (especialmente si son lucidas por las jóvenes ejemplares de la raza humana- ha alegrado la vista este verano, que acabamos de despedir.
Pero las piernas masculinas también son importantes en muchas conversaciones, incluso de tipos que presumen de pelo en pecho y de que, en caso extremo, no dejarían que un pelo de gamba atravesara otro orificio de su anatomía que no fuera el previsto para la ingesta, pero que no pueden evitar -a lo que parece- preocuparse por el estado de las piernas de Ronaldo, Messi, Iniesta, Nadal y muchos otros deportistas que ocupan un espacio excesivo en las preocupaciones triviales de una parte nada despreciable de los espectadores deportivos.
Ah, pero nuestras piernas son también muy importantes, y no las utilizamos tanto como debiéramos. Hoy, día 22 de septiembre de 2010, es el día internacional sin coches. Por los datos, no le hemos hecho mucho caso a la celebración. Hemos sabido, y constatado personalmente, que seguimos yendo al trabajo con importante uso del transporte privado.
Las piernas de todos, femeninas como masculinas, exigen darles más publicidad, para que se tome consciencia colectiva del que es su oficio principal: caminar, andar, servir para desplazarse. Que, además, algunas sean bonitas o fuertes es un complemento, no un fin en sí mismo. Y lo que nos ahorraríamos en energía, en importación de combustibles fósiles, en enfermedades coronarias, ni se sabe
1 comentario
Maria -
Por otra parte, invitar a caminar es una propusta moderna y pedir que se queme carbón para que los "pobrecitos" mineros cobren la nómina subvencionada es una propueta de iletrados y aprovechados.