Blogia
Al Socaire de El blog de Angel Arias

Por colisión de las placas europea y africana, Lorca sufre un grave terremoto

No es una metáfora. El conjunto de fallas del Valle del Guadalentín, de origen tectónico y sísmicamente activo, ha causado nuevos terremotos en la zona mediterránea; esta vez, de magnitud inferior a 5,1 en la escala de Richter.

Fue el 11 de mayo de 2011 y sus sufridores en esta ocasión, los 92.000 habitantes de la hermosa ciudad murciana de Lorca. Hubo 8 fallecidos, casi todos por la caída de cascotes desde las cornisas a la calle, en donde se encontraban, dada la hora, o donde habían pensado encontrar mejor refugio.

No es posible predecir el momento exacto de los terremotos, pero sí están localizadas (también por razón de los daños que causaron en la historia reciente) las zonas de mayor sismicidad en el planeta Tierra. No servirá de tranquilidad a los murcianos recordar ahora que, como ha explicado Roberto Rodríguez, del Instituto Geológico y Minero (IGME), las regiones de Murcia y Granada, además de estar en una zona sísmica, tienen a sus poblaciones más importantes sobre terrenos de aluvión, "donde los seísmos se propagan más" (rápidamente, ofreciendo el terreno menor resistencia y, por tanto, llegan con capacidad más destructiva a la superficie). 

Una vez que se recupere algo la tranquilidad, pero antes de que llegue otra vez el olvido, será imprescindible que se revise la resistencia a los terromotos de los edificios e infraestructuras que se encuentran en zona sísmica.

No vamos a cambiar su ubicación, desde luego, pero de vez en cuando conviene que, además de preocuparnos, como bien nacidos, de lo que sucede lejos de nuestras fronteras, nos pongamos a trabajar, como sensatos, en corregir lo que nos afecta directamente.

Por cierto, a unos 200 km del lugar del epicentro se encuentra la central nuclear de Cofrentes, con 1.100 Mw de potencia instalada, un reactor de tecnología BWR (agua hirviendo) que ha resistido el terremoto sin ninguna consecuencia.

(Por supuesto, todo nuestro respeto hacia los fallecidos y dedicamos las más cariñosas palabras de ánimo para los heridos, y los familiares y amigos de todos ellos.

Aunque, dada la premonición del experto Roberto Rodríguez (EP, 12 de mayo 2011) de que "si dentro de una semana hay otro no es de extrañar", deberíamos estar todos más avisados respecto a la necesidad de preparar a las poblaciones de la zona en cuanto a lo que deben hacer: si ponerse bajo una mesa, salir a la calle, marcharse ya a otro sitio o confiar en que la probable réplica no supere el nivel 7 en la escala MSK ("daños no generalizados") y se mantenga lejos del que destruyó prácticamente la ciudad en 1674, con su magnitud 9 en la escala MSK.

Porque, para revisar una a una las edificaciones realizadas en la zona sísmica y comprobar su verdadera resistencia a terremotos del grado máximo previsible en ella, tendremos –ojalá- algo más de tiempo)

0 comentarios